Flight of the Navigator, El vuelo del navegante en España,
es una película estadounidense de ciencia ficción de 1986. Dirigida por Randal
Kleiser, que recordaremos por películas como Grease, El Lago Azul o un amor de
verano entre otras.
El argumento de la película sería algo así:
En 1978, David, un niño de 12 años, sale en busca de su
hermano Jeff, pero cae por un precipicio
y queda inconsciente. Unos minutos más tarde despierta y al volver a su casa,
se entera que han pasado Ocho años y que ha sido dado por desaparecido. Por si
fuera poco, empieza a ser perseguido por la NASA, que sostiene que ha sido
abducido.
En el papel principal, tenemos haciendo de David a Joey
Cramer quien no tuvo una carrera muy boyante en el mundo del cine y su película
más notable fue esta. Para la voz, en su idioma original, de la nave Trimaxion
o Max, tenemos a Paul Reubens, quien conoceremos por interpretar a Pee-wee
Herman o si veis Gotham como el padre del pingüino, “Inciso: no está hecho a
posta, pero si en el anterior programa hablamos de una serie donde aparecía la
actriz que hacía de la madre del pingüino, en este del padre” No juzgo su
actuación, ya que solo la he visto en castellano. El actor de doblaje en
castellano de Max, sería Salvador Aldeguer, voz habitual de Antonio Banderas,
Charlie Sheen o Martin Lawrence y está bastante correcto, sin ser brillante
está muy bien defendido. En el reparto, lo que más me llamó la atención en su
revisionado, fue cuando salieron los créditos y me di cuenta que Carolyn, la
chica que trabaja en la NASA, es Sarah Jessica Parker, muy conocida por Sexo en
Nueva York y es que está irreconocible en esta película. También es que hace ya
30 años de esta película.
Durante la película nos encontraremos con una trama que
mezcla lo mejor de la aventura con lo mejor de la ciencia ficción, con viajes
en el tiempo, es una mezcla entre ET y Regreso al futuro. Una familia que ha
sufrido la pérdida de su primogénito y tiene que lidiar con la vuelta de este 8
años después y sin crecer y tienen que establecer una nueva relación. Una que
refleja la obsesión de la ciencia, por descubrir los secretos del universo y
para ello, pretenden encerrar a un muchacho que se acaba de reencontrar con su
familia, sin pensar en las consecuencias pueda acarrear al muchacho. Y otra
trama, que intenta humanizar y dotar de sentimientos a la nave espacial, que
por otro lado es muy Disney esto de dotar de sentimientos a cualquier cosa.
Fue distribuida por Disney y se le atribuye a que es una
película Disney por ello, aunque fue producida por Producers Sales
Organization, quien había sido responsable de películas como La historia
interminable o Nueve semanas y media. Pero el darle la distribución a Disney,
se consideró comúnmente que la cinta fuese suya.
Fue la primera película rodad en 35mm usando mapeado digital
generado por ordenador. Aunque no se usó el CGI para diseñar los escalones
suspendidos de la nave, para ello utilizaron una ilusión óptica colocando unas
barras delgadas puestas en ángulo y el efecto de la puerta licuándose, se
desarrollo mediante la técnica spot-motion. Además, se usaron dos maquetas a
tamaño real de la nave, una con la entrada abierta y otra sellada y ahora se
encuentran una en el Reino mágico de Disneyworld y la otra en Disney’s
Hollywood Studios.
La banda sonora, está compuesta por Alan Silvestri y fue
generada utilizando el Synclavier, uno de los primeros sintetizadores
digitales.
En 2009 se habló de un posible remake, pero a día de hoy, no
ha salido nada y parece que la idea se ha enfriado, sobretodo, después de que
Colin Trevorrow, quien iba a ser el director, fuese designado para dirigir el
episodio 9 de Star Wars.
La película a día de hoy se deja ver, posiblemente, que no
haya tanto CGI y el uso de las técnicas antes nombradas, haya hecho que no
envejezca del todo mal, ya que se puede volver a ver para pasar una tarde de
domingo en familia.
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